El Harpagophytum procumbens, conocido comúnmente como garra del diablo, es una planta originaria de las sabanas del sur de África, perteneciente a la familia de las Pedaliaceae. Además de sus usos nutracéuticos, la garra del diablo es apreciada por su singular fruto en forma de gancho, que se ha utilizado en artesanía y decoración.
Una anécdota interesante: su nombre, «garra del diablo», proviene del aspecto de su fruto en forma de garra, diseñado para adherirse al pelaje de los animales que pasan, ayudando a dispersar las semillas.